Cuando me miro al espejo a veces nose quien soy y es que tal vez pienso que fuiste tú el que me robo mi identidad.
Cuando imagino nuestros reflejos no veo más que unos ojos cansados, llenos de lagrimas y cansados de tantas y tantas mentiras.

En ocasiones imagino tu cara cuando me sueltas cualquier prepotencia, tan seria pero a la vez tan dulce...tienes que ser alguien muy especial para haberme creado esta ansiedad.
No todo el mundo tiene la capacidad de querer tanto en tan poco tiempo algo, esto puede ser afortunado o no, porque si no es correpondido me duele el pecho, me falta el aire y todo porque se que no estás ni estarás nunca.
Me ilusionno cuando pienso que quizás en algun momento me mirararás con otros ojos que no sean con los de una niña.
Se que no te puedo dar las gracias por nada porque si me enseñaste a querer fue solo un cruel reflejo de mi realidad, eso sí, me enseñaste a odiar el amor, y aunque parezca duro era hora de que alguien me mostrara que nada es como en las peliculas.
Que tu jamás aparecerás con una amplia sonrisa diciendome lo mucho que necesitas mi mirada o mis ganas de vivir la vida.
Cuando te hablo es como si me doliera el pecho fuertemente y me faltaran las ganas de respirar...¿Sabes lo que es para mi que me escribas hola y le des al intro de tu teclado? Una fuerte sonrisa durante todo el día, nada ni nada la puede borrar hasta que me doy cuenta de que contigo todo es de mentira.
Unos dias mal y otros peores son lo que me hace darme cuenta lo duro que es seguir esperando que algún dia un te quiero.
Después de todo eres el unico que puede salvarme y a pesar de ello las lagrimas que recorren mis mejillas siguen fluyendo como si fueran de la alegria de un te quiero tuyo, cuando verdaderamente es del dolor de saber que tu no eres para mi y yo si soy para ti.
Todo esto lo decidiste tú y aunque me escueza esta herida se que es verdad, se que cada vez tienes más razón, solo que aun no quiero admitir que contigo he tirado todas mis esperanzas por la borda.
Algún dia sin pensarlo me encontraré en tu mirada, y querré estar siempre perdida en ella.